martes, 23 de octubre de 2018

Libros del otoño 2018. Sexta parte.

Sylvain Tesson "Berezina".
Un libro curioso. Unos aventureros franceses deciden recorrer en invierno la ruta de la retirada de Napoleón desde Moscú. Y lo más curioso es que lo hacen en sidecar.
Por lo demás es el típico libro de viajes que aprovecha el paso por los sitios para contarnos los hechos históricos que sucedieron en ellos. Lo más sorprendente es que narra la historia de una retirada desastrosa. Narra el fin sangriento de un dictador.
Me ha gustado porque narra hechos que, no por conocidos, sorprenden menos. Encima nos narran los hechos desde el punto de vista de los franceses. Parece increíble que medio millón de hombres mueran entre la nieve, el frío y el hambre debido al capricho de un tirano. Y termina el libro contando el desparpajo con el que Napoleón abandona a sus hombres a su suerte para sobrevivir él y mantener su tiranía algún tiempo más.

Libros del otoño 2018. Quinta parte

Oferta Laszewicki Rubín "Israel fuera del foco" "Retratos de la sociedad más allá del conflicto"
Un libro sobre Israel. Contado por una persona judía que critica todo lo que no le gusta, incluso los asentamientos. De manera suave, pero sin tregua, cuenta todo lo que le gusta y lo que no le gusta. De esta manera el libro es fácil de leer, aunque no le gustará a la "opinión única" que siempre obliga a estar de lado de los palestinos.
Corto, fácil, leve, pero crítico. Curioso libro.

sábado, 20 de octubre de 2018

Libros del otoño 2018. Cuarta parte

John Verdun, "Sé lo que estás pensando"
Una novela de misterio, de terror e incluso de espionaje. Todo en uno.
La ambientación en ese hotel en las montañas, rodeados de nieve, incomunicados, es agobiante. Trae recuerdos de "el resplandor" y no se puede evitar pensar en Jack Nicholson corriendo por los pasillos. La trama sí que está un poco alargada y enrevesada. Al final deriva por un lado que te esperas, pero no como te esperas. Está todo el libro jugando con la idea del gobierno y luego resulta que no tiene nada que ver, por lo que me parece tramposa.
No es una maravilla, pero se deja leer. Y, sobre todo, te atrapa por el paisaje y el agobio de toda la situación. En este sentido hasta podía calificarse de novela de terror.

lunes, 1 de octubre de 2018

Libros del otoño 2018. Tercera parte

Ramón Lobo "Cuadernos de Kabul"
Un libro de crónicas cortas contando, cada una, una historia de esas sencillas que pasan cada día en una ciudad. La particularidad es que la ciudad es Kabul, después de treinta años de guerra. Donde el peligro, la pobreza y la desesperación reinan por doquier.
El autor lo relata cómo si fueran cuentos, aunque en realidad son crónicas de guerra de un corresponsal que decide fijarse en la realidad cotidiana de la pobre gente que vive en zona de guerra sin participar en ella. Pero sufriéndola.
Está bien, es tierno, duro, crítico, didáctico, sangrante, desgarrador, infantil, adulto, ... Es todo eso y mucho más.
Se lee como un latigazo, por lo rápido que se hace y por lo que impresiona.

martes, 25 de septiembre de 2018

Libros del otoño 2018. Segunda partd

Benjamin Black "En busca de April".
Un libro sobre Dublin. Nos relata una historia de personajes solitarios en una sociedad cerrada de los años 50. Quirque es un personaje contradictorio y temeroso de todo y de todos que se desenvuelve por la vida dando tumbos. Su hija es otra solitaria más que intenta encontrar su camino. El resto de personajes no están tan bien definidos.
La historia en sí trata sobre la bússqueda de unachica desaparecida que intuimos que ha podido ser asesinada. La oveja negra de una familia bien que no quiere saber nada de ella, aparentemente. La realida es bien distinta, pero intentan desesperadamente que Quirque no se entere de las interioridades de la familia. No deja de ser la historia habitual de trapos sucios en las relaciones familiares.
No acaba de convencerme

jueves, 13 de septiembre de 2018

Libros del otoño 2018. Primera parte

Francisco Marín "El caso Demichellis"
Curioso: ni conocía al autor, ni conocía el libro. Lo encontré en Amazon Prime gratis para subscriptores. Y lo leí.
El libro es novela negra, ambientada en Ibiza. Pero en este caso la isla no es un personaje. No influye en la acción.
En general es entretenida. Intenta crear una personalidad a cada protagonista, aunque no profundiza demasiado. El caso da varias vueltas, pero no se pierde y es fácil de leer y de entender.
Novela de fin de verano, sin más

domingo, 2 de septiembre de 2018

Vacaciones del verano 2018. Sextuagésimo tercer, cuarto, quinto y sexto días

Últimos cuatro días y decidimos hacerlos de relax total en Canalejas. Jugar en el corral, leer, coger saltamontes, renacuajos, ...
El viernes nos vamos a Guardo, vemos el rastro y mini juega toda la mañana en el parque con la tirolina. Después se dedica a ver los patos. Aprovechando que hay un puesto con saldo de zapatos "pitillos" compramos unos zapatos Tere y otros yo. Una gran oferta.
El sábado bajamos a Almanza y mini juega y juega en el parque que hay al lado de la iglesia. Yo aprovecho para ir hasta circos a ver si veo el famoso parque de la naturaleza, pero no lo encuentro.
El domingo, vuelta a casa, otro verano que se acaba.

sábado, 1 de septiembre de 2018

Libros del verano 2018. Décimo quinta parte

Tom Hillerman "el coyote acecha"
Otra novela de este autor. Para mí el gran descubrimiento de este verano. También corta, se lee rápidamente.
Novedad: el segundo gran protagonista:el teniente Leaphorn. También navajo, pero menos convencido y más aconstumbrado a las formas del hombre blanco.
En este caso Chee se ve involucrado por la muerte de su compañero de patrulla. De nuevo, el desierto, se configura como el gran protagonista del libro para cautivarnos. Pero esta vez hay muchos más personajes y mucha más ciudad. No por ello abandona su permanente utilización de las constumbres del pueblo navajo.
Al final nada es lo que parece, o todo es lo que parece, pero con un fondo y unas razones totalmente distintas a las que se vislumbran al comienzo de la novela.
Para mí, una gozada

jueves, 30 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Sextuagésimo. Sextuagésimo primero y sextuagésimo segundo días

Nos quedamos en León. Por la mañana Maritere se va a la fisio y Aitana y yo a la piscina. Por la tarde nos vamos todos juntos a la piscina. Aitana juega en los columpios y las bolas y nosotros cenamos bocadillos en el Recreo.
El martes tenemos la revisión de la niña y yo tengo que ir a la dirección provincial a hablar con inspección. Después recibimos a los abuelos en la terraza. Encima tengo que arreglar el tríptico por enésima vez. Por la tarde hay tormenta y nos vamos a Carrefour para que juegue en el parque infantil. A la vuelta a casa lavamos el coche.
El miércoles acabo de pintar techo y paredes de la terraza y luego nos vamos a la piscina. Tere se va a la peluquería. De tarde nos vamos a Canalejas y comemos un helado en el Oasis.

miércoles, 29 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Quincuagésimo noveno día

Hoy hemos madrugado menos. Aún así después de desayunar la mañana es lo suficientemente larga para hacer una ruta de cinco kilómetros hasta el Castro celta.
La primera parte de la ruta ya la había os hecho hace dos años cuando estuvimos aquí. Después de pasar el mirador se indica la única parte dura, con una subida importante hasta que nos unimos al camino principal que viene del aparcamiento. A partir de ahí la ruta va por un camino bien trazado con muros de roca a los lados y totalmente cubierto de árboles que refrescan el trayecto. Después de pasar una pequeña cascada salimos de los árboles y nos encontramos encima de una roca enorme que se inclina hacia el río (parece la roca final de la película "El último Móhicano"). Aquí nos damos cuenta todo lo que hemos subido desde el río. Ya vemos el Castro y en lo más alto nos sentamos a descansar.
Aunque parezca increíble, el camino de vuelta se hace mucho más corto.
Llegados al coche nos ponemos el bañador y al río, en la playa fluvial de Lubián.
Nos vamos a comer a La Gudiña en una área de servicio muy bonita porque tiene una pared entera que es una cristalera al valle. Por el camino vemos un incendio, que parece provocado por una colilla, y la cantidad de medios que tiene que haber para sofocarlo. Mini se pone a hablar con dos militares que están comiendo y les saca una bandera de España.
Después de comer volvemos al pueblo y nos despedimos de la madre de Zulema para irnos a casa.
Todavía al llegar a León tiene tiempo Tere de quedar con Electa que está estos días por aquí arreglando cosas de sus padres.
Un fin de semana bien aprovechado.

lunes, 27 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Quincuagésimo octavo día

Nos levantamos descansados y contentos porque hemos dormido bien. Quizás Tere un poco peor porque se desveló a media noche por el calor.
Desayunamos con Zulema, que había dormido en casa de su madre y nos vamos a Verín.
Paseamos por el balneario de "Cabreiroá" y entramos en el kiosko dónde dan a probar el agua. Huele a huevos podridos pero sabe a agua con gas y no sabe mal.
Después nos damos un paseo por el pueblo y tomamos un ribeiro con pulpo en una pulpería. Al salir, todavía se las arregla Aitana para jugar un momento en los columpios.
Nos vamos a Chaves y comemos en un sitio que nos recomienda un primo de Zulema. Unas raciones (media) de bacalao que sin impresionantemente grandes. Al salir subimos al castillo y vemos la plaza, el ayuntamiento, la iglesia, ... Terminamos baja do al balneario a beber el agua. Aquí no es carbonatada como en Verín, pero es caliente, a 70°.
Al salir volvemos a España y vamos a Hermesinde a tumbarnos al borde del río en esa pradera tan bonita que hay al lado del puente medieval. Aitana incluso se baña en la presita que han hecho.
Terminamos el día en la plaza del pueblo tomando unas latas de cerveza del bar mientras Aitana juega mucho rato en los columpios.
Al volver a casa cenamos de picoteo y yo me voy a la cama mientras Tere y Zulema se dan un paseo por el pueblo

viernes, 24 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Quincuagésimo séptimo día

Hoy nos hemos ido de excursión a Puebla de Sanabria.
Al llegar al lago nos ha sorprendido que no estuviera lleno, incluso hemos podido aparcar al lado del agua. Le ponemos el bañador a Aitana y al agua. Cómo no había estado nunca en un lago se ha sentido un poco desorientada y no se atreve a entrae. Así que me pongo el bañador y me baño con ella. Increíble, un lago glaciar y el agua está calentita. Jugamos con las piedras, a ver peces, a nadar hasta las boyas, a hacer pasteles de arena, ... En fin, dos horas después terminamos saliendo del agua porque se ha levantado algo de aire y el cuerpo se queda frío en cuanto sale del agua.
Nos vamos a comer a Ribadelago y la verdad es que muy bien. La carne expléndida y el postre esquisito.
Después paramos en El Puente y compramos un regalo a Zulema en una feria medieval.
Llegamos a Lubian y nos vamos al supermercado y al bar a tomar una cerveza.
Cenamos en casa.

jueves, 23 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Quincuagésimo sexto día

Día en León. Por la mañana limpio los baños mientras Aitana ve una película. Después nos vamos a la piscina hasta las 3.
Después de comer Aitana juega mientras descansamos un rato. La llama Elena y los dos gemelos de su clase (Carlos y César).
Nos vamos al parque y estamos un par de horas en el CCC con Benigno y Ramiro (que se va a Lituania). Después estamos otro rato con Celia y su madre Esperanza.
De noche subo las maletas para la excursión de mañana.

miércoles, 22 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Quincuagédimo quinto día

Hoy toca Valladolid.
Nos levantamos, desayunamos, nos vestimos y nos vamos.
El trozo de autopista hasta Santas Martas hace que el viaje dure 10 minutos menos y parece que llegas a Valladolid en un periquete.
Otro gallo es encontrar el médico de Ana. Una vez allí resulta que la consulta dura diez minutos, así que nos vamos sin más hasta Olmedo. El pueblo es pequeñito y comemos en un asador típico (pese a las buenas opiniones de TripAdvisor, no muy bien). Tras finalizar la comida Ana le hace sus regalos, un peluche de un caballo y el chándal de lady bug.
Después vemos la plaza mayor y tomamos un café en un bar de ella. Desde allí nos vamos al palacio del caballero de Olmedo y no entramos (la chica nos reconoce que ni siquiera es un palacio tradicional del pueblo, que es una casona habilitada donde se ven 7 habitaciones con sendos vídeos representando la famosa obra).
Para ver el parque Mudéjar aparcamos en el extraordinario balneario y cruzamos por un expectacular puente sobre la carretera. Una vez dentro descubrimos unas maquetas preciosas de las principales construcciones del Mudéjar de Castilla y León. Incluso en los dos castillos, Coca y Medina del Campo, se puede entrar. Además hay una maqueta de tren gigantesca que recorre todo el parque con estaciones como las de los pueblos de la comunidad. Muy bien.
Desde allí volvemos a Valladolid para terminar, como siempre, en Primark y la niña en el parque de bolas.
Después de dejar a Ana nos vamos a cenar a Medina de Rioseco. Hay bastante ambiente por las calles, se nota el pasado de la villa y los restos todavía están vivos. En recuerdo a papá ceno morro y mollejas.
De allí a casa con Aitana durmiendo en el coche, un paseo.

Vacaciones del verano 2018. Quincuagésimo primer, segundo, tercer y cuarto días

Sábado por la mañana y nos vamos a Canalejas. Decidimos ir al Corte Inglés a comprar el uniforme de la niña aprovechando  que es muy pronto y todavía no faltará nada y no habrá cola. Entre unas cosas y otras llegamos a la hora de comer. Tarde de tranquilidad absoluta sólo truncada por la visita del cura y las campanas de la misa a la que se van Rosa y Alfonso. Por la noche Aitana monta un espectáculo para sacar el diente. Cosa que al final no ocurre. Para dormir se tiene que tumbar alguien en la cama con ella, y nos ocurre todos los días de Canalejas.
Al levantarme el domingo no puedo aguantar el dolor de oídos que me ha empezado por la noche y tomo un Paracetamol de la abuela. Mañana de misa, con todo el ritual habitual de este familia. Después de comer y la siesta, Maritere y yo nos vamos a León a coger mis medicinas y a coger los regalos de Aitana y comprar alguna cosa en Carrefour. Después a cenar al pueblo y fiesta del diente otra vez que termina igual, el diente sin sacar y yo durmiendo con ella.
El lunes se plantea como día de reposo absoluto con mini jugando con todos y pendiente de la celebración de mañana.
Martes. Día de celebrar el cumple de Aitana. A media mañana llaman al timbre y aparece Elsa de Frozen. Se queda de piedra, por el tamaño de la muñeca y por la magia de la llamada. En la comida, después de la tarta aparecen todos los regalos: casitas de pin y pon, corona, libros, guitarra, micrófono, pinturas, bolso, cartas, maletín, ... Se pone como loca y nos da una tarde de guitarreo que parece la gran fiesta.
Para terminar el día nos vamos a Veneros a ver al primo de Maritere. Por el camino los tíos se pierden, pero al final llegan. Después de estar con él, charlar un rato y ver los conejos nos vamos a dormir a León.
Todavía antes de dormir tengo que grabar un disco con vídeos para Ana, así que aprovecho para ver la última película de Jim Sheridan "La carta secreta" que impacta bastante.

Vacaciones del verano 2018. Cuadragésimo octavo y noveno días. Quincuagésimo día

Días de piscina a lo loco.
Por la tarde tomamos unas cervezas en el bar del recreo con Juan y Marta. Muy bien. Nos comentan que están a régimen, él para adelgazar y ella para dejar de fumar y que se van todos los días a andar .le tras dejan a los niños en el recreo.
Mini disfruta del parque y las bolas como una campeona.
El jueves yo recojo los análisis del médico y parece que todo sigue bien. Después estamos con los abuelos y parece que todo toma el camino correcto. A mediodía Maritere va a la masajista por lo del pie (parece que le sienta bien).
El viernes decidimos volver unos días a Canalejas a partir del sábado.

Vacaciones del verano 2018. Cuadragésimo séptimo día

Hoy hemos ido al Recreo por la mañana y por la tarde. Mini se ha bañado hasta reventar.
La novedad es que por la tarde había una fiesta con bollos preñaos y cerveza que nos hemos comido Tere y yo mientras la niña jugaba en el parque.
Después la niña se ha ido a las bolas y nos hemos quedado hasta tarde porque aprovechamos a tomar las sopas de ajo (un poco picantes, muy ricas). Con las sopas nos han regalado los dos platos de cerámica y dos cucharas de madera que nos vienen de maravilla para la cocina.
Buen día

martes, 21 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Cuadragésimo segundo, tercer, cuarto, quinto y sexto días

Días de piscina a lo loco.
Por la mañanas mini y yo nos vamos al Recreo y se baña jugando conmigo a lo loco. Todos los días aprovecho para darme un jacuzzi sin prisas. Varios días me encuentro tel con Alfredo y charlamos un rato.
Por las tardes nos vamos los tres al Recreo y mini se baña jugando con amiguitos. Después todos los días nos vamos a los columpios y a tomar algo. Bien.
Algún días nos encontramos con Marta y Juan. Luis y tomamos algo jintos, la verdad es que sin gente maja y se está bien con ellos.
Por las mañanas aprovecho para limpiar la casa y los cristales de la terraza hasta la hora de ir a la piscina.

Vacaciones del verano 2018. Cuadragésimo primer día

Dís complicado.
Nos levantamos pronto por la mañana y vamos a León. Yo a hacer lo de Luisa y Maritere a la peluquería.
A la vuelta decidimos que ya llevamos mucho en Canalejas y volvemos a León, pero está vez con Aitana.
Terminamos la tarde en el parque donde nos encontramos con. Celia que venía de la piscina y lo pasan las dos en grande.

lunes, 20 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Cuadragésimo día

Valladolid.
Nos vamos a ver a Ana hasta Valladolid.
Nada más llegar corriendo a la consulta que para poder acompañarla hemos venido hoy. Fallo, se equivocó de día y no tenía.
Por no variar nos vamos al centro comercial y mini disfruta del resto de la mañana en la guardería de Ikea. Después comemos allí (Ana pide varios platos, postre y coca cola, que luego no come ni bebé) mientras nosotros pedimos nuestras albóndigas habituales. Allí mismo Aitana se pone a jugar en el parque infantil del comedor y, rápidamente, hace amigos para estar jugando una hora y media. A la mitad de la cual Ana y Maritere se van al Primark.
Después nos vamos al juego de las bolas dos horas, durante las cuales voy a Leroy Merlín a comprar un grifo para sustituir el del baño grande que gotea. Además cojo el ordenador y mando los correos del sindicato después de hablar con Paco para que lo ponga en la web.
Después llevamos Ana a casa y nos volvemos a Canalejas. Que ya son las ocho y media

Vacaciones del verano 2018. Trigésimo noveno día

Vuelta a Canalejas. Fiesta de El Salvador.
A primera hora de la mañana cogemos el coche y partimos de vuelta al pueblo. Decidimos volver por el camino del norte y la verdad es que se disfruta mucho, porque no hace calor, por el paisaje, por la carretera, por todo en general.
Tras pasar Aguilar nos fijamos los campos con cereal y comentamos que nos parece increíble que lo haya tan al norte, pero lo cierto es que lo hay.
Los pueblos, hace años tan vivos, con la minería, se ven ahora poco menos que abandonados. Es una pena reconocer que ya no vienen ni veraneantes.
De nuevo paramos en Cervera a comprar dulces. Comienzo de una travesía en la que disfrutamos más que nunca de la carretera porque nos encontramos dos tractores con remolques de paja y tardamos muchos kilómetros en poder adelantarlos.
Tras pasar por Guardo paramos en Puente Almuey a comprar Donuts. Cosa curiosa, la panadera no nos los quiere vender porque están reservados para los clientes habituales.
Llegados a Canalejas, a toda velocidad, cambio de ropa, acicalarnos y a la misa del Patrón, con procesión italiana digna de grabar y ver en la mejor historia de Sicilia.
Cómo buena fiesta, terminamos comiendo opíparamente y timbándonos toda la tarde a descansar.
Mañana será otro día.

Libros del verano 2018. Decimo sexta parte

Gregory Benford "El temor de la Fundación" - Segunda trilogía de la fundación 1
Me encantaron los libros de la fundación, pero éste no me enganchó en ningún momento y, al final, lo dejé.

Libros del verano 2018. Décimo cuarta parte

María Oruña "un lugar a donde ir"
Me gustó esta autora y por eso me he vuelto a ella para leer la segunda novela.
Los protagonistas son los mismos y el argumento vuelve a ser el de varios asesinatos que se complican con similitudes que parecen incongruentes.
El caso avanza y al final da un giro argumental inesperado que relaciona el caso, de nuevo, con la vida de Oliver. Lo mejor de todo es que permite resolver todas las incógnitas que quedaban pendientes de su vida anterior en la primera novela.
A lo largo del relato se vé cómo va avanzando la relación personal de los dos protagonistas dando pasos en común y estableciendo amistades comunes. Todo incipiente, pero bien relatado y llevado puesto que es continuación inmediata de la anterior novela y los saltos excesivos en las relaciones se verían como artificiales.
La trama de nuevo vuelve a aprovechar las características monumentales de Cantabria, siguiendo una corriente muy en boga actualmente, por lo que pide os pensar que es una novela más que se sube al carro de la moda.
Pero entretiene y engancha.

Vacaciones del verano 2018. Trigésimo sexto, séptimo y octavo días

Días de playa por la mañana y juegos de tarde.
El viernes nos vamos a la playa y jugamos con las olas basándonos varias veces. Además la tía saca una cometa y se pasan una buena parte de la mañana volándola. La niña se lo pasa en grande.
Comemos en casa y los tíos y Maritere se van al festival Paloma O'Shea a la primera final.
Mientras tanto la niña y yo nos vamos a comer un yogurt helado, a la cervecería del hinchable y a los columpios. Total, mini no para desde las cinco y media y las diez. En los columpios hace una amiguita con la que juega varias horas.
Cuando vuelven del festival nos vamos otra vez a cenar al restaurante de ayer. Hoy tocan hamburguesa más pequeñas para todos y una ración de rabas.
El sábado volvemos a la playa y repetimos cometa, salto de olas, baños y más baños. Cómo novedad nos encontramos con Fuensanta, una amiga de Rosamari que está de vacaciones.
Para aprovechar la playa estamos hasta las cuatro y comemos tarde. De esta manera nada más comer se tiene que arreglar y se van al fastival.
Sorprendentemente mini se tumba y se duerme desde las cinco hasta las nueve. Cómo le cansa la playa. Probrecina. Pero, aún así, cuando se despierta vamos a comer un yogurt helado y a la cervecería. Pero sigue cansada y estamos sólo un momento antes del parque. Allí de nuevo se encuentra a su amiguita y juegan y juegan hasta que vuelven del concierto Maritere y los tíos.
Hoy si cenamos en casa.
El domingo se repite igual al sábado. La novedad en la playa es que hacemos un castillo enorme rodeando la sombrilla y las toallas.
Comemos en casa.
Por la tarde repetimos el proceso hasta que vienen de la final. Ha ganado el concurso el ucraniano, tal y como predijeron los tres, por lo que están muy contentos.
Cenamos en casa todo lo que queda y hacemos las maletas que mañana toca viaje por la mañana.

domingo, 19 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Trigésimo quinto día

Playa a mañana y tarde.
Un día fantástico a la playa y a disfrutar. Mini se lo ha pasado en grande y ha hecho más horas de playa que ... Ha saltado olas y más olas, conmigo, con Maritere y con Rosa. Además hemos jugado con los cubos de playa y la niña ha hecho algunas figuritas en un ratito en el que Maritere y Rosa se han ido a dar un paseo por la playa.
Comemos en casa todos juntos y descansamos un rato antes de volver a la playa. Por cierto, se estropea la tele y no podemos verla.
Alfonso se ha quedado en casa leyendo porque la playa le cansa demasiado.
A última hora de la tarde hemos salido un rato al parque y los tíos nos han llevado a un sitio a comer un yogurt helado que está más rico que el helado.
De noche nos hemos ido a cenar a un restaurante unas hamburguesas.

Vacaciones del verano 2018. Trigésimo cuarto día

Viaje a Somo.
A primera hora de la mañana cogemos el coche y nos dirigimos a Somo para pasar unos días de playa y conciertos.
Decidimos ir por la ruta del norte, más corta en km pero más larga en tiempo porque es peor carretera. Pero mucho más bonita.
Tras parar en la gasolinera de Guardo, donde también están Rosamari y Alfonso cogemos la carretera preciosa al lado de la montaña que lleva hasta Cervera. Siempre me ha encantado, la montaña, esa especie de páramo que se pasa, ... En fin, una gozada.
En Cervera paramos a coger lazos típicos y nos quedamos muy atrás de los tíos, con lo cual ya llegamos a Somo mucho después que ellos.
El día está bueno, pero algunas nubes hacen que se quede fresco. Así que nos vamos a comer a un restaurante y de tarde a los columpios, donde la niña se lo pasa en grande. Mientras tanto, los tíos se van a Santander a por las entradas del festival y a ver alguna de las semifinales.
Después de los columpios encontramos una cervecería donde hay un hinchable, con lo que mini termina de pasárselo en grande.
Un gran día

Vacaciones del verano 2018. Trigésimo primer, segundo y tercer días

Tres días más de descanso en Canalejas.
El domingo nos vamos a misa con Tino, que ya se despide porque se marcha al acabar el mes.
Los otros dos días transcurren entre bajar a León (para hablar con Gonzalo sobre la reclamación de la baremación de interinos) y hacer horas de lectura en el corral.
Preparación para ir a Santander. Nos esperan más días de playa.

Vacaciones del verano 2018. Vigésimo noveno y trigésimo días

Tras un día de corral y descanso solo podemos emprender una nueva excursión.
Pero antes, el viernes de tarde nos vamos a Guardo a coger el dinosaurio de la niña en el Día. Se ha puesto super contenta. Encima encontramos unos columpios en la orilla del río fantásticos: tienen todo lo necesario para que juegue un niño y encima, una tirolina. Mini se lo pasa en grande
Nos vamos a la villa romana de la Tejada cerca de Carrión de los Condes. Es una villa que no está tan publicitada como la de la Olmeda, pero no está mal. Se trata, más que de una villa, de unas termas. Se ven claramente las piscinas y las dependencias para cambiarse y para descargar. La villa tiene además un patio rodeado de un seto verde que la oculta totalmente de la carretera.
Después nos vamos a Carrión y vemos la misa del peregrino en una basílica muy bonita. Más tarde paseamos por el casco antiguo y vemos la portada de la iglesia principal antes de subir por la calle mayor hasta el castillo donde vemos una representación teatral. Por no variar, mini se ha puesto a jugar en los columpios y hasta ha hecho una amiga.
Decidimos terminar la jornada cenando en San Zoilo. Pero entre los precios que vemos, la escasez de las raciones y la desidia de los camareros terminamos quedándonos en canal y teniendo que cenar en casa a las 11 y media cuando llegamos.

Vacaciones del verano 2018. Vigésimo octavo día

Mañana de corral y tarde de excursión
Nos vamos a Villaverde de Arcayos para que Aitana juegue en los columpios del frontón. Mientras tomamos unas Coca colas.
Después nos vamos a recorrer la carretera del valle de Valderaduey. Maritere nos comenta que de aquí provenían algunos antepasados de sus padres. Nos llama la atención lo cuidados que están algunos pueblos y las cantidad de gente que hay. El valle es bonito porque en los alrededores del río hay mucha vegetación y en las lomas se ven bosques.

Vacaciones del verano 2018. Vigésimo sexto y vigésimo séptimo días

Días de Canalejas. Jugar con la niña, pasear, largas tardes de tumbona y lectura. Relax absoluto.
Mientras tanto Teresina a Cisterna todos los días para la reabilitación
Una tarde nos vamos a Almanza al bar de la colchoneta. Así Aitana lo disfruta a lo grande. Sin embargo, tampoco es que haya muchos niños allí tampoco y al final sólo juega con una niña

sábado, 18 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Vigésimo quinto día

La mañana ha sido normal en Canalejas. Hemos estado en el corral con la niña y hemos jugado a sus juegos. Su alegría nos transmite ilusión a todos los demás.
Hoy, por hacer algo diferente,  hemos cogido el coche y nos hemos ido a Sahagún. Allí, además de ir al supermercado Día, hemos dado una vuelta y nos hemos sentado en el bar de la plaza a tomar algo viendo como Aitana juega en los columpios. Rosa Mari y Alfonso se han ido a ver La Paregrina y hacer unas fotos y, al final, se han venido al bar. No es nada muy especial, pero ha roto la rutina de estos días.

Vacaciones del verano 2018. Vigésimo tercer y vigésimo cuarto días

Días de tranquilidad absoluta en Canalejas.
Corral, corral y más corral.
Estamos tan relajados que ni siquiera nos vamos a Sahechores a comer un helado.
La única nota que altera algo el día es la misa del domingo. Ya sabemos, todos vestidos como para una fiesta grande en un pueblo en el que van a misa cuatro viejos.
Por la tarde bajamos a Almanza para que la niña juegue en la cama elástica del bar.

martes, 14 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Vigésimo segundo día

Otro año más un día importante. Dormimos en León para llevar a Aitana bien vestida y arreglada a la cita con Teresa, Elisa y el resto de chicas de Colón.
Pero antes de ir allí Maritere se va al traumatólogo que le dice que tiene mal el pie y le da diez sesiones de fisio.
Cada año qué pasa la conversación es más distendida. No puede ser de otra manera cuando está todo dicho y el tiempo ha confirmado sin lugar a la más mínima duda que las decisiones son las correctas.
Para celebrarlo nos vamos a comer y entramos en el bar enfrente del Olimpia a comer un magnífico plato combinado.
De tarde nos vamos a Carrefour a comprar y mini termina jugando en el cuarto que tienen. Muy bien.
En el camino a Canalejas nos paramos en el Oasis a comer un helado. Llegar, cenar y recibir a Alfonso y Rosamari que vienen de vacaciones completa un día intenso, pero parecido al ya vivido en años anteriores

Libros del verano 2018. Décimo tercera parte

Fernando Gamboa "Riley".
Una novela de aventuras al más puro estilo de Salgari. ¿Por qué la comparó con Salgari? Por el mar y los barcos.
Toda la aventura transcurre en un barco, salvo la escala en Tánger. Pero tiene todos los ingredientes para emocionar al que le gusten las novelas de aventuras: barco pirata, Segunda Guerra Mundial, Nazis, Tánger ciudad abierta, banqueros millonarios, un secreto que destruirá el mundo, ...
No deja ningún elemento, incluso el capitán Riley y su tripulación son los típicos indestructibles. Les pasa de todo y sobreviven. Encima son piratas, pero de una honestidad a prueba de bombas. Encima salvan el mundo.
Es un BEST SELLER en toda su extensión, se lee de un tirón, entretiene y no angustia ni hace pensar.
¿Alguien puede dar más como lectura de verano?

Vacaciones del verano 2018. Décimo noveno, vigésimo y vigésimo primer días

Nos levantamos y Tere se va a La Regla a que le mire los pies el traumatólogo. Mientras tanto nos vamos de nuevo al parque. Después nos dirigimos a Canalejas.
La tarde y los dos días siguientes los pasamos de descanso en el pueblo con los abuelos.
¡Tranquilidad, tranquilidad y más tranquilidad!
Aprovecho para recorrer algunos de los senderos que ya conozco para recordar mis trayectos habituales.
La niña va a ver a las vacas, a los columpios, a la fuente, ...

sábado, 11 de agosto de 2018

Libros del verano 2018. Duodécima parte

Bruce Springsteen "Born to run"
No es ni el disco, ni la canción. Es un libro autobiográfico del artista de Jersey.
Partamos de su falta de calidad. Bruce es un compositor y cantante de rock, no un novelista. Sólo apto para los que somos fanáticos incondicionales de su música.
Empecemos: la historia nos comenta sus principios, cuando todavía buscaba su lugar en el mundo. Esta es la parte más descriptiva de su vida
Después nos va comentando su situación personal al realizar cada disco y esto es para mí lo mejor: me da una nueva visión de sus canciones.
En pequeños párrafos nos da detalles de su vida personal, pero son ligeros y breves. En realidad lo que quería contar es, claramente, la historia del rockero. Perfecto en este sentido.
Falta mucho, pero ¿qué se le puede pedir a un libro sobre "the Boss"?

lunes, 6 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2013. Décimo tercer día

Hoy ha amanecido nublado y con una temperatura sensiblemente inferior. Así que cogemos el coche y nos vamos de excursión a Alcalá de los Gazules. Estamos ante otro pueblo blanco, aunque todavía más inclinado que todos los anteriores. Sin embargo está muy buen planteado y se puede subir rodeando la montaña por un lado y bajar bordeándola por otro.
Una vez llegados a la plaza mayor nos encontramos un colegio concertado que nos dejan entrar a verlo para que Aitana vaya al baño. El patio es precioso, totalmente andaluz, con azulejos, un jardín posterior y un patio ajardinado para los más pequeños. Una monja muy amable nos lo enseña todo y nos permite ver hasta los uniformes que han ido teniendo los niños a lo largo de los años. Nos comenta que está abierto porque hay niños que siguen viniendo al comedor en verano como ayuda social a las familias. Un pena.
Después vemos la torre del Homenaje del castillo árabe, la iglesia de San Jorge, el Ayuntamiento y la plaza Mayor. Se nota mucho que es el interior y hay mucho menos turismo, por lo que todo es más pobre.
Volvemos y nos vamos a comer a la cofradía de pescadores.
A la tarde parece que mejora el tiempo y nos vamos a la playa, aunque hay bandera amarilla y unas olas, consecuentemente, espléndidas.
Volvemos a casa para que Aitana cene salchichas y leche. Después la llevamos a la feria y nosotros cenamos en la playa antes de los caballitos.

sábado, 4 de agosto de 2018

Libros del verano 2018. Undécima parte

Ben Pastor. "Martín Bora 2: Luna Mentirosa"
Un libro que empezaba bien. Encima el tema y la ambientación eran buenas.sin embargo, ... Un rollo, pedante y sin nada destacable. Vueltas y más vueltas para alargar una historia sin fondo.
No merece la pena.

Libros del verano 2018. Décima parte

María Oruña "Puerto escondido".
Grata sorpresa. No conocía a la autora y me atreví con el libro porque está ambientado en Suances (Cantabria) y estamos en Somo. Me pareció que la coincidencia merecía una lectura. No me arrepiento.
La forma de contar la historia es bastante tradicional. Mezcla hechos del presente con hechos del pasado. Al final todo se mezcla y ambos, pasado y futuro confluyen y se influyen mutuamente para producir un resultado catastrófico. El mal campa a sus anchas entre personas pusilánimes, psicópatas y aprovechados. El protagonista es alguien nuevo que no sabe nada de su pasado familiar y aparece como un ángel bueno. Quizás demasiado rebuscado, todo el mundo tiene lados oscuros. La policía tiene un pasado angustioso pero es competente y manifiesta manías habituales en el género. Sus adjuntos no están muy bien descritos. Se nos cuentan retazos de su vida, pero no cómo son en realidad.
La lectura se deja llevar, incluso es bastante entretenida.
La ambientación en Cantabria no es típica. Habla del tiempo, pero no se aprovecha del típico tiempo del Cantábrico para hacer una atmósfera angustiosa.
Buena novela para el verano, pero sin esperar grandes cosas.

Libros del verano 2018. Novena parte 4

Andrea Camilleri "un mes con Montalvano"

* Cincuenta pares de zapatos claveteado. En un asesinato las huellas de zapatos señalan a un hombre de las montañas. Pero todo se aclara cuando se conoce que ha ocurrido un robo.

* La lata muerta. Un relato sobre el contrabando de diamantes.

* Un rincón del paraíso. Una excursión a una playa desierta. Un crimen que se resuelve por casualidad en ella.

* Fin de año. Un asesinato en un hotel con Montalvano enfermo. Al final la fiesta se convierte en tragedia por las infidelidades.

* El tirón. Un congreso en Palermo al que asiste el comisario da lugar a un tirón nocturno al volver al hotel. Se descubre que el ladrón sale en moto por las noches para entretenerse. Sin embargo, el final resulta inesperado.

* Doble móvil. Un asesinato con 2 sospechosos: la viuda y el hijo. El testamento termina delatando al autor del crimen

viernes, 3 de agosto de 2018

Vacaciones del verano 2018. Décimo octavo día

Amanece en Guadalupe. Nada más levantarnos abrimos la ventana y vemos el monasterio, ¡Precioso!
Nos vestimos y vamos a desayunar a una churrería que habíamos visto ayer en la calle principal. Nos ponen el café y se les olvidan los churros, así que los renos que volver a pedir al cabo de un rato.
Después de volver a la habitación para recoger nos vamos. La carretera sube y atraviesa la sierra por unos valles poblados de arboles que se parecen al norte de León. Es sorprendente como tan al sur se repiten los paisajes en cuanto aparece la montaña. Finalmente bajamos hacia Castilla - La Mancha y vemos unas ruinas romanas en una colina al lado de un pantano. Parece que los romanos hicieron las casas para poder bañarse, aunque el pantano es muy posterior, claro.
Después de pasar Navalmoral de la Mata, Plasencia, Béjar y Salamanca, paramos en Zamora a poner gasolina ( por cierto, muy barata) y seguimos hasta el área de servicio de Villaquejida donde comemos. En el propio área hay un pequeño corral con gallinas y pavos reales que le encantan a Aitana.
Llegamos a León, deshacemos las maletas y nos vamos al parque. Siempre nos las arreglamos para que mini se lo pase bien.

Vacaciones del verano 2018. Décimo séptimo día

Fin de las vacaciones en el sur. Nos levantamos sin prisa, porque vamos a dormir en Guadalupe y eso implica menos kilómetros que otros años. Son casi las 10 cuando por fin nos ponemos en marcha.
La ruta es cómoda y super conocida. Las marismas de Cádiz entre San Fernando y Puerto Real, la AP4 hasta Sevilla y el puente del Centenario (¡sin atascos!). Paramos en la gasolinera de Itálica donde comimos en el 2013 con Javier y Zulema. Aprovechamos para ir al baño, tomar un café y nos comemos los primeros bocadillos de tortilla.
En la A66 cruzamos la sierra mientras Aitana se duerme. Ha pasado infinidad de veces esta carretera y no puede sonarle porque siempre duerme. Al llegar a Mérida nos desviamos por las radial A5 hasta dejarla en Miajadas por las carreteras que conducen a la montaña. El paisaje va cambiando, con lomas y algo más de vegetación. En casi la hora de comer y nos paramos en Zorita a tomar una caña y un helado. Curioso nos da peor tapa que a los parroquianos.
Continuamos y pasamos un pequeño puerto con paisajes ya de montaña antes de llegar a Guadalupe.
El pueblo está casi vacío. Más tarde nos comentan que el mes de julio es el más flojo de todo el año. Entramos a ver la iglesia y continuamos con el monasterio. Justo hay una visita con guía a las cuatro y la aprovechamos. Nos enseña el museo de casillas, de libros, de esculturas, el coro y la Virgen. Todo impresionante y emocionante (besar a la Virgen emociona). Pero lo más espectacular es la sacristía que se asemeja a la capilla Sixtina en la firma, aunque pintada por Zurbarán en vez de Miguel Ángel. Espectacular es poco decir. Admiración y algo más, ...
Terminamos la visita en el claustro. Este es el sitio donde podemos hacer fotos. Está muy bien, con un kiosko central con forma de flor y dos galerías totalmente diferentes: la baja  románica y la alta mudéjar.
Después de visitar la tienda nos vamos al hotel y a comer. Escogemos un bar del pueblo donde había parado ya otra familia que había hecho la visita a la vez que nosotros. Curioso, en una de las mesas de al lado una familia francesa está viendo la final del mundial (que terminan ganando a Croacia por agotamiento de los croatas, que estaban jugando mejor). Probamos las morcillas típicas y una ensalada de pimientos bastante rica.
Nos damos un buen paseo por el pueblo rodeando el monasterio y vemos el parador, con un patio andaluz, las casas porticadas, el otro claustro del monasterio que ahora es una hospedería y las calles inclinadas con soportales típicas de los pueblos de la zona.
Aprovechamos para ir a misa al monasterio y después nos vamos a los columpios donde Aitana cena un potito y nosotros los bocadillos de tortilla que quedaban.
Al volver al hotel Aitana se cae y se roza la rodilla por lo que, sin cortame ni un pelo, meto el coche por una de las puertas de la parte antigua para dejarles en la puerta del hotel. La odisea viene después para llevar el coche a la salida, sobre todo la puerta en 90° del fin del pueblo.
Fin del día en una delicioso hotel donde nos regalan unos bombones riquísimos y una botella de vino que nos llevamos. Además los enseres de baño son completísimos. Se cumplen todos comentarios de la gente y las toallas tiene un tacto divino.

Vacaciones del verano 2018. Décimo sexto día

Último día de Sancti Petri. La luz cegadora del sur se nos escapa otro año más. Pero bueno, hay que aprovecharlo.
En la playa se dedica a saltar las olas con la tabla. Ahora que ya ha aprendido se lo pasa en grande. Después de comer, otra sesión maratoniana de tabla. Hoy nos traemos los monitos a la playa y los tomamos juntos para aprovechar la hora feliz.
Al subir a casa nos encontramos con Antonio y sus padres y se despiden con pena. Eso es buen síntoma, se lo han pasado bien.
Hoy nos quedamos a cenar en casa y a hacer las maletas. Yo sí que salgo a lavar el coche y a llenar el depósito para el viaje.

Vacaciones del verano 2018. Décimo quinto día

Día total de playa. Nos levantamos tarde porque mini duerme hasta las 11. Después de desayunar nos vamos a la playa con su pingüino. Juega tanto que empieza a flotar ladeado y al final se deshincha. Nos bañamos todos, primero yo y luego Tere. Por supuesto, Aitana se baña varias veces. Siempre me asombra la pasión que tiene por el agua.
Come os arroz con tomate y huevos cocidos. Le gusta tanto que se lo come todo y al final no es capaz de acabar el helado.
Tere se tumba un rato porque tiene un pie mal y hay que curar las heridas por lo que se tumba un rato. Aprovecho el gel de curar para arreglar el pingüino.
Bajamos a la playa y nos encontramos con Antonio y sus padres (el niño con el que juega en la piscina). Juegan a lo loco con pelotas y cubitos. El padre le enseña a Aitana a surfear con la tabla. Al final la disfruta como una descosida.
Al volver a casa mini cena y después nos vamos a Sancti Petri a cenar nosotros. Encontramos un restaurante nuevo donde tienen una pequeña habitación anexa al comedor con juguetes. Consecuencia, se lo pasa en grande con unas niñas que están allí y nos deja cenar tranquilamente.
Como ya es casi el último día nos vamos a la feria y vuelve a montar en el tren, el ciempiés y las colchonetas de saltar. Termina agotada y volvemos a casa felices y contentos.

Vacaciones del verano 2018. Décimo cuarto día

Otro día que amanece nublado. Sin embargo, entre el desayuno y echarnos la crema sale el sol.
En la playa Tere ve unos pingüinos que flotan y le compra uno a la niña. Se entusiasma y juega y juega sin parar hasta las tres.
Comemos en casa macarrones con huevos cocidos.
De tarde más playa y más pingüino. Aitana se lo pasa en grande y disfruta como una enana. Aprovecho la hora feliz del chiringuito para ir a tomar un mojito sentado en las mesas tranquilamente leyendo y viendo el mar y el sol al fondo. La luz es increíble. ¡Cómo me gusta esta playa!. Después le llevo el segundo mojito a Tere a la sombrilla.
Volvemos a casa y cena Aitana. Se come un huevo con salchichas como una campeona.
Terminamos el día yendo a Conil a cenar. Por no variar volvemos al Oasis para comer la mezcla deliciosa de pescaítos. Al dar el paseo volvemos a ver al payaso en la torre. El tío se lo curra como un campeón.
Nos comemos unos helados y volvemos a casa. Entre unas cosas y otras terminamos en la cama casi a las doce, así que la niña cae rendida. ¡Es una campeona!.

Vacaciones del verano 2018. Duodécimo día

Hoy amanece nublado. Así que cambiamos de planes y Rosa y Alfonso hacen la maleta y la meten en el coche. Día de excursión. Arcos de la Frontera.
Después de lo que nos pasó hace cuatro años, que casi nos quedamos atascados, decidimos aparcar abajo y subir en taxi hasta el Ayuntamiento.
La plaza es espectacular por las vistas que tiene al valle que se ve al fondo de la roca sobre la que se asienta el pueblo. El ayuntamiento no llama mucho la atención, pero la fachada central y la lateral de la iglesia son impresionantes. De aquí callejeamos un poco y vemos otra iglesia, un jardín, un patio, varios conventos, en definitiva, toda la parte de arriba del pueblo.
Cómo tenemos tiempo decidimos comer en un bar al lado del ayuntamiento: Alfonso hamburguesa de retinto, la niña salchichas, Rosamari y yo salmorejo y de segundo pollo yo y ellos tabla de embutido. La bebida sí que fue curiosa, pedimos tinto de verano y a mí me lo trajeron sin alcohol. Sin embargo lo curioso es que pusieron una naranja y un trozo de sandía de adorno, además de uvas y melocotón dentro.
Después de comer, bajamos andando al coche aprovechando para ver el resto del pueblo.
Llegó la hora de la despedida en el aeropuerto de Jerez. Los tíos se marcharon a Bilbao. Podían haberse quedado más días, pero en fin, asį es la vida.
Volvemos a casa y nos vamos a la playa aunque se nubla un poco y a las 8 nos volvemos.
Una buena cena de salchichas y huevo en tortilla francesa y a dormir, que el día ha sido largo y caluroso.

Vacaciones del verano 2018. Undécimo día

Otro día que nos llevantamos tardísimo. Terminamos he dicho a la playa a las 12.
Comemos en casa gazpacho y ensalada de canónigos con tortitas de camarón.
Tarde de piscina.
Al anochecer nos vamos de excursión a Puerto de Santa María (no hay mucho que ver, parece una ciudad colonial venida a menos) donde paramos a hacernos fotos en las bodegas Osborne.
Seguimos la carretera de la costa y vemos la base de Rota (enorme) y de allí a Chipiona. Mini se duerme en el coche y tenemos que comprar comida para llevar y cenar en un banco al lado del coche. Hay un ambiente de lo más andaluz. Nos hacemos fotos en la playa junto al santuario de la Virgen y vemos todo lo que se cuece por allí
La vuelta a casa se hace rápido porque ahora sí que vamos por la autopista.

Vacaciones del verano 2018. Décimo día

Mañana total de playa. Hay tanta gente (es domingo) que es imposible aparcar y tengo que subir casi hasta el Ilunion. Después de la playa vuelvo al coche y bajo a buscarles.
La comida en casa consiste otra vez en gazpacho y filetes de pollo. Aunque a mí me toca comer el puré que no quiere Aitana porque come arroz antes del filete de pollo. Para terminar nos comemos unos helados.
Cómo la playa estaba a rebosar preferimos quedarnos por la tarde en la piscina con el delfín. La niña se lo pasa en grande con otras dos niñas que se hacen amigas con el hincha le y las pistolas de agua.
Después decidimos ir a Conil por la carretera de Roche. Atravesamos el pinar y nos paramos en el faro a hacer fotos. Por no variar hay una puesta de sol preciosa y las calas de Conil se ven de un marrón espectacular.
Al llegar paseamos por el mercadillo y nos encontramos a Claudia (la niña de música). Terminamos en el Oasis como siempre, pero esta vez comiendo hamburguesas de carne de retinto.
Al pasear por el pueblo vemos una actuación de flamenco de unas escuelas del pueblo. No son maravillas, pero estando allí entretienen.
Antes de comer los helados Alfonso le compra a la niña el bolso que le había llamado la atención el otro día. Se pone más contenta que nunca y la cara de alegría vale su peso en oro.

Vacaciones del verano 2018. Noveno día

Mañana de playa. Estamos teniendo una suerte increíble. Nos llegan noticias de toda España con inundaciones, tormentas y mal tiempo en general. Nosotros, sin embargo, con sol y calor.
De nuevo pasamos por el super antes de comer en casa. Hoy toca filete de pollo, gazpacho y helado.
De tarde hacemos una de las tradicionales excursiones: Tarifa. Hace un día genial y se ve África perfectamente desde la carretera. En la playas hay infinidad de gente haciendo katesurf.
Después de cuatro años por fin entramos en el castillo de Guzmán donde aprovechamos para ver la exposición de Montseni. El castillo en sus almenas tiene unas vistas espectaculares. Por contra el mobiliario interior es muy pobre. Curiosamente, hay una capilla dentro del castillo.
A la salida nos damos un paseo por el interior del pueblo y vemos la zona de ambiente. Terminamos en los columpios y los caballitos. Aunque aprovechamos para comer un pastel típico.
Cómo es sábado aprovechamos para ir a misa (es curioso, pero terminamos en la misma iglesia que hace dos años).
Para terminar el día cenamos en una freiduría de la calle principal.
La vuelta a casa, ya de noche, nos brinda una imagen de la montaña de Vejer iluminada que es, sencillamente, maravillosa.

Vacaciones del verano 2018. Octavo día

Otra vez nos levantamos tarde. Entre desayunar, darnos la crema y eso bajamos a la playa a los 11 y media. Cómo hay bandera verde y buenas olas nos bañamos más de una hora. Después Tere y Aitana se van a recoger conchas. Sí que parezca increíble todavía nos volvemos a bañar más de una hora después.
Por no variar paramos en el super al volver a casa donde comemos lechuga con anchoas y ajo y huevos cocidos con mayonesa.
De tarde nos vamos a la piscina con el delfín que le hincho a Aitana. Allí se hace amiga de un niño que luego veremos muchas veces en la playa.
Al anochecer hacemos una excursión a San Fernando. Tiene un aire a ciudad del Caribe (por el tipo de casas). Paseamos por la ciudad y vemos la Academia de la Armada, el teatro Real, el castillo, la venta de Vargas, la calle mayor, las iglesias, ...
Decidimos cenar en la Venta, por lo típico. La verdad es que es un homenaje a todo lo casposo que existe en España. Pero aprovechan la leyenda de Camarón con todo. El camarero nos vende lalto y nos endilga sólo 3 raciones de pescaítos (casi al precio de 4) y una papas arreglás, que nos cobra como oro. Pero bueno, una vez es una vez.
Es curiosa la vida, cuando estamos en la venta esperando la cena entra a fisgarla Begoña, la orientadora. No nos vemos en el instituto y nos encontramos al otro lado de España.

martes, 31 de julio de 2018

Vacaciones del verano 2018. Séptimo día

Hoy nos despertamos tarde y bajamos a la playa a las 12 menos cuarto. Rosa y Alfonso se van a dar un paseo y nosotros jugamos al veo-veo.
Dos horas de baño más tarde, saltar las olas y jugar con la pistola de agua volvemos a casa tras parar en el supermercado.
Comemos ensalada de tomate y tortillas. Mini se ha comido dos trozos como una campeona.
De tarde bajamos a la piscina.
Nos vamos a cenar a Sancti Petri. Probamos una pizzería muy buena y nos vamos a la feria y al mercadillo.

Libros del verano 2018. Novena parte 3

Andrea Camilleri "un mes con Montalvano"

* El viejo ladrón. Un viejo ladrón es detenido al salir de una mansión por un guarda jurado. Lo que se descubre en comisaría es una graciosa historia de infidelidades.

* La vidente. Una historia de venganza a lo largo de más de 40 años.

* Policías y ladrones. En una agradable comida en una casa de campo con amigos el comisario detiene a un delincuente de manera casual al jugar a policías y ladrones con el niño.

* Mano de artista. Un suicida intenta imputarle su muerte a su hermano cómo venganza. Muy curioso el montaje.

* El hombre que iba a los entierros. Una persona a la que le falta una pierna va siempre a todos los funerales. Un día le asesinan. La.labor del comisario es encontrar al culpable y la causa.

* Un asunto delicado. Una niña acusa a su maestro. El comisario descubre el complot de la madre.

* El yac. Problemas con un antiguo compañero de escuela.

* Los dos filósofos y el tiempo. Un petrolero atraca en la Marina y los marineros hacen de las suyas.

Libros del verano 2018. Novena parte 2

Andrea Camilleri "un mes con Montalvano"
* El compañero de viaje. Una litera de un tren. Un asesinato y la suposición de la culpabilidad del compañero de la litera de al lado.
* Una trampa para gatos. Una pequeña aventura en la que el comisario desacredita a una familia de la Mafia.
* Milagros de Triestre. Montalvano llega a la ciudad para un congreso. Le roban la cartera en la estación y descubre que es un antiguo compañero de colegio.
* Ícaro. Un circo, un misterio
* La advertencia. Los celos, malos consejeros, conducen a una mujer y a un hombre a amargarse mutuamente la vida.
* Being here ... . Un americano llega a recordar su juventud y se encuentra en una lápida como caído en la guerra.
*El pacto. Un asesinato entre ancianos la rememora un viejo pacto de 1936.
* Lo que contó Aulo Gelio. Cuando está comiendo en un barco de carretera unos matones intentan asesinar a Salvo. Sin embargo, uno de ellos le salva ¿Una vieja cuenta ha sido saldada?. Aprovecha para decir los componentes del pulpo a la napolitana: aceitunas negras, alcaparras, ajo, tomate, sal, aceite, pimienta, piñones, pasas, perejil y pan tostado.

Libros del verano 2018. Novena parte 1

Andrea Camilleri "Un mes con Montalbano"
Colección de relatos cortos de un día de duración cada uno que relatan el equivalente a un mes.
El anónimo, trata sobre una esposa que, con ayuda de su ante, planea liquidar a su marido.
El arte de la adivinación, un director acusa a un empleado de intentar matarle. Todo es una estratagema de este último para asustarle y que se vaya de la ciudad.
Las siglas, un vagabundo que vive en la playa muere asesinado. Cómo era amigo del comisario le deja un mensaje en la arena con siglas para que descubra la verdad en el más remoto pasado.
Par condicio, un asesinato en una de las familias de la mafia local lleva a una oleada de venganzas.
Amor, una desaparición. Dos historias que se cruzan, un final sorprendente.
Una giganta de amables sonrisa, una historia de amor prohibido con una esposa generosa. Una de esas historias que sólo se entienden en la idiosincrasia de los pueblos.
Un diario del 43, un incendio descubre los restos de un viejo diario de una persona de la resistencia. El comisario se encarga de encontrar a los familiares para contarles la verdad.
El olor del diablo, una historia de estafas que utilizan el miedo ancestral al demonio.

viernes, 27 de julio de 2018

Vacaciones del verano 2018. Sexto día

Otra mañana de playa. Rosa y Alfonso se van de paseo hasta el chringuito de la Torre del pueblo. Increíble, hay bandera amarilla y algo de resaca. Aún. Así nos bañamos dos veces. Aitana  se pone a llorar porque no le compramos un a ión de polixpan que venden en la playa.
De vuelta a casa paramos en el Supersol a comprar algo de comida. Al final terminamos comiendo macarrones y una ensalada de canónigos.
Tarde de playa, aunque con el viento, la bandera amarilla y la resaca nos bañamos poco.
A la noche vamos a Conil a cenar, otra vez pescaíto frito en nuestro bar preferido. Aprovechamos para ver la exposición de la iglesia (un pintor muy bueno). Para terminar el día nos damos un paseo por el pueblo y comemos un helado.

Vacaciones del verano 2018. Quinto día

Mañana de playa. A las diez y media bajamos hasta las dos. Hoy toca saltar las olas porque Aitana no quiere sacar la tabla. Es curioso, le pidió a Maritere la tabla y cuando la compra ahora no quiere utilizarla. Hoy pasa el carro de chuches (rodeado con churros y la bandera de España) y compramos dos bolsas.
Volvemos a casa y comemos chuleta de cerdo, mini come dos como una campeona, lo que tiene la playa, y gazpacho. Además terminamos, por fin, el jamón que vino de León.
A las tres y media nos vamos a Jerez a recoger a Rosa y Alfonso en el vuelo de Bilbao.
Desde allí nos vamos a Bornos. Primer pueblo blanco de este año. Allí vemos el convento de Sancti Christi, que ahora es un instituto. Después el palacio de los Ribera que es espectacular, con un patio y unos jardines increibles. Después nos vamos a la iglesia parroquial.
Terminamos el día yendo a Arcos de la Frontera a ver al amigo de Alfonso que nos enseña su residencia. El nos lleva a cenar a un sitio en el que se ve la roca del pueblo iluminada. Comemos entrantes de anchoas y sardinillas. De segundo carne de ternera, calamares y ensalada.  Además la niña come croquetas de jamón.
Después de la cena nos volvemos a casa. Un trayecto largo, pero muy ilusionados

jueves, 26 de julio de 2018

Vacaciones del verano 2018. Cuarto día

Al levantarnos está medio nublado. Incluso durante el desayuno se cubre el cielo y llueve un poco. Aún así nos arriesgamos a ponernos la crema y en ese lapso sale el sol.
Como otros años al llegar al aparcamiento de la playa está la asociación de desempleados de Chiclana cobrando un euro por estar allí. No deja de ser una forma de mendicidad más. Aitana disfruta de la arena como loca. No hay mas que decir que llegamos a las 11 y salimos de la playa a las 3. A media mañana me voy al chiringuito a tomar un café, otra vez esa sensación de vacaciones increíble que vale por todo el año.
Comemos en casa pollo asado y un helado y mini ve la tele miéntras Tere se vuelve al centro comercial y yo veo el futbol. A las 5, a la playa. Otra vez mini apura hasta las 9.
Para cenar repetimos, Aitana cena en casa salchichas y leche con casco y luego nos vamos a Conil. Cenamos en nuestro restaurante favorito (fue el sitio donde comimos la primera vez con Javier y Zulema, allá por el 2013). Los pescítos fenomenal, mejor que los de la cofradía de pescadores: el adobo, la a instancia de peces, encima más barato.
A la salida nos encontramos con un payaso que actúa en la calle. Nos gusta la actuación y después nos comemos unos helados. Para terminar llevamos a Aitana a la feria.

Vacaciones 2018. Tercer día

Antes de acostarnos habíamos fichado un churrería en la plaza y bajamos a desayunar. Los churros son más grandes y más gordos que los de León. Si fueran rectos serían porras, pero la verdad es que tienen las formas más variadas.
Carretera hacia Cádiz. Nos paramos antes de Sevilla a recargar gasolina por si el puente está atascado. Curioso, no hay mucho tráfico en el puente del Centenario. Pero, hay atasco al salir de la AP4 y coger la autopista de la costa. Esto nos retrasa pero a la una y cuarto llegamos a Sancti Petri.
Me llevo a la piscina a Mini mientras Maritere se va a la compra de la comida. Comemos y vemos el partido de España (Tere aprovecha para ir a hacer ya la compra grande).
Cómo el partido se alarga nos vamos a la playa durante la prórroga. Cuando llegamos nos enteramos que España ha caído, pero en fin, ... Aitana se lo pasa en grande.
Volvemos a casa y cena Aitana, para a continuación, irnos a la cofradía de pescadores. Una pena, se ha vuelto más restaurante y ha perdido el encanto. ¡Qué le vamos a hacer!

miércoles, 25 de julio de 2018

Libros del verano 2018. Séptima parte

Tom Hillerman "Sendero de los espíritus"
Vi el nombre en una lista de novelas de detectives por casualidad y me llamó la atención por la temática. Muy original lo del policía indio en la reserva navajo.
Lo mejor de la novela es el ambiente del desierto de Arizona, de grandes espacios, de la dureza de la vida en la reserva, de las tradiciones indias que aún luchan por sobrevivir, del desprecio de los blancos, del lejano oeste estadounidense, en definitiva.
El argumento en sí está ya muy traído, los delincuentes traficantes que se traicionan entre sí para quedarse con el botín. Aprovechando la inmensidad del desierto y la lejanía de la ley en la reserva hacen de las suyas, pero algo sale mal y de ahí aparece el hilo que permite al policía tribal seguir la pista. Todo ello aderezado con una historia de venganza y de desencanto que aprovecha las tradiciones indias para su interés.
El final, en una mesa en un día de difuntos, es espectacular. Te lleva a imaginar el fin de cualquier gran película del oeste.
No parece una gran novela, pero he disfrutado muchísimo. Quizá es que lo que sueño me influye en la lectura.

Vacaciones 2018. Segundo día

El hotel de Plasencia nos sorprende con un buen desayuno. A continuación, recogemos y nos vamos hacia Mérida.
Al salir de Plasencia nos fijamos en el surrealista edificio del palacio de exposiciones, parece un invernadero. No es de recibo lo que está pasando en este país con la tontería localista que nos lleva a tener todos palacios de congresos, exposiciones, auditorios, palacios, ...
Aunque parezca increíble nos llueve todo el camino hasta Mérida. A las 11 empezamos la visita del teatro y anfiteatro. A la niña le encantan y hace un montón de fotos. Sigue lloviendo a ratos y nos vamos a la cripta de Santa Elisa, continuando con el templo de Diana, donde Tere compra en una tienda de saldos dos zapatos para la niña, y las ruinas de la ciudad musulmana, puente romano y alcazaba.
Aprovechamos una tormenta a mediodía para comer en el restaurante Catedral en la plaza de España. Después nos dirigimos al museo romano y cogemos el coche para ir al hotel. Es pequeño pero está muy bien, además de estar muy cerca de la casa Mitreos, por lo que aprovechamos para ir a verla. Después nos sentamos en una cervecería de la plaza mientras Aitana juega con unos niños en unos columpios.
Aunque parezca increíble todavía nos queda comida de casa y terminamos cenando en la habitación.

Vacaciones 2018. Primer día

Día del claustro. Pero como han sido a primera hora de la mañana nos las arreglamos para salir a las 12:40 rumbo al sur. ¡Qué sensación emprender de nuevo el camino por la A66, que ya se ha convertido en nuestra carretera!. Este año el camino va ser un poco diferente porque lo haremos en tres días.
Por no variar mini se duerme y así podemos avanzar. Pasamos Zamora, Salamanca, Guijuelo, Béjar y Hervás. Sí, Hervás. Este año hemos decidido aprovechar los viajes para ver cosas.
Lo primero que hacemos es comer en un parque que hay a la entrada. Que rico el jamón y el gazpacho. Dos clásicos en los viajes.
Después de comer vamos a recorrer el pueblo, aunque lo primero es pararse a tomar un café y un helado. La calle de entrada parece de principios del siglo XX. Toda ella rodeada de árboles con casas con balcones. Lo mejor, sin embargo, llega después, la judería. No es muy grande, pero es espectacular. Muy original lo de utilizar tejas como si fueran azulejos en las paredes. Las calles en cuesta, donde se ven recovecos por las casas me parecen encantadoras. Bajamos hasta el río y vemos las extraordinarias fachadas y el puente. Después subimos hasta la iglesia, que es tan grande que parece un castillo, dominando todo el pueblo. Después de tres horas, a las seis y media proseguimos camino.
Quince minutos y estamos en Plasencia. Lo primero, coger el hotel. Después nos vamos en coche al centro y, en el camino, vemos el acueducto. En la zona peatonal bajamos hasta la plaza mayor donde hay un bonito Ayuntamiento y varias casas con escudos. Nos tomamos un helado y vamos a ver las dos catedrales. Se parece mucho a Salamanca, tanto que parece una versión reducida de ella.
Después de cenar en un restaurante de la plaza (migas, ensalada de las hurdes), cogemos el coche para volver al hotel y damos una vuelta a todo el casco viejo para ver las murallas. Nos sorprenden por  el tamaño, ¡casi rodean toda la villa!

lunes, 23 de julio de 2018

Libros del verano 2018. Octava parte

Tony Hillerman "vendaval de tinieblas"
Me encanta este autor. No por la calidad de las novelas, es por su ambientación.
La obra es una novela de detectives al uso. El argumento está bien, pero tampoco es que sea de una elaboración extraordinaria. Los personajes no son excesivamente profundos. La conclusión es rápida, al estilo de una película del oeste, pero sin alargarse en demasía y sin ser especial. Sin embargo, ...
La bientación en el desierto de la reserva navajo de Arizona y Nuevo México está muy bien. Soy capaz de sumergirme en el paisaje y disfrutar de él como si fuera mío. Me hace integrarme y me evade de una manera prodigiosa.

sábado, 21 de julio de 2018

Libros del verano 2018. Sexta parte

Lorenzo Silva "Lejos del corazón"
No había leído nada de este escritor, pero me llamó la atención por la localización, el campo de Gibraltar.
La historia nos cuenta una investigación policial de un secuestro en Algeciras. Aprovechando la historia se nos hace ver todo lo que ocurre en la zona con el tráfico de drogas y de personas. Se nos muestra una sociedad corrompida que ataca a la policía y defiende a los traficantes por más que todo lo que hacen sea delito.
Por lo demás, la escritura no es especialmente buena y la historia deja mucho que desear.
Sólo atractivo para mí que conozco la zona

Libros del verano 2018. Quinta parte

Stephen King "Quién pierde paga".
Un maestro del terror haciendo una novela negra. Parece que algo chirría. Sin embargo, está bien. Aunque sí que hay momentos de terror. O, al menos, de angustia. Y el final sí que es terrorífico.
Las novelas de Stephen King me gustan. Pero siempre hay algún momento en el que se me hacen pesadas. En los puntos intermedios me da la impresión que se enrolla para alargar la historia. Tampoco es que sobre nada. Quizás es que se hacen algo largas.
La historia parte de unos hechos de lo más inverosímil, aunque todas las novelas negras parten de hechos increíbles. Quizás es que el comportamiento humano es así y lo único que hacen es reflejarlo. Luego la entrada del niño, así como el protagonismo suyo en la novela se antojan algo disparatados. Al menos para cómo son los niños hoy en día. Es la parte que provoca angustia. El final directamente es terrorífico, mezclando maldad, locura y alucinaciones.
Entretenido no se puede negar que sea. Una mezcla de géneros que no desilusiona.

Libros del verano 2018. Cuarta parte

Arthur C. Clarke "Islas en el cielo".
Hablar de Clarke en ciencia ficción es hablar de un maestro, es hablar de calidad y es hablar de profundidad. Maestro porque es uno de los primeros y que ha mostrado el camino a infinidad de otros escritores. Calidad porque sus novelas siempre están bien escritas, aportan muchos datos científicos que el tiempo ha convertido en reales y encima entretienen. Profundidad porque los grandes temas de pensamiento siempre aparecen en su obra: Dios, muerte, ...
Esta novela, corta pero intensa, nos muestra al mejor Clarke. Parece una novela para niños, pero según se va desgranando nos plantea la estación espacial, parecida a la que tenemos hoy en día, la vida en Marte, en la luna, en fin, todo lo que nos encontramos como un futuro próximo. Además plantea los satélites de comunicaciones, que ahora ya existen. En definitiva, parece premonitoria.
El argumento en sí, sí que es leve. El viaje de un niño a la estación espacial como premio por ganar un programa de televisión. La escusa permite al autor pronosticar cómo va a ser el futuro inmediato. Pero la aprovecha para hablar del hambre (las plantaciones sobre el océano Pacífico), la escasez de materiales (las minas en la luna), el aumento de la población (las colonias en la luna y en Marte), los problemas energéticos (la energía solar recolectada por gigantescas placas en el espacio), ...
En definitiva, una delicia más de este hombre.

viernes, 13 de julio de 2018

Libros del verano 2018. Tercera parte

Xavier Quiroga "la casa del nazi".
Un libro formato BEST SELLER de un autor gallego. Lo he leído por el título y la frase que lo define.
A pesar del título el libro trata sobre la búsqueda de un hombre de sus orígenes. Que en esos orígenes estuviera un nazi de los que huyeron al final de la Segunda Guerra Mundial es circunstancial y se me antoja que un reclamo. Lo que se nos retrata es el caciquismo de la Galicia rural de los años 40 del siglo XX. Aderezado por las posiciones de prepotencia de los que se arrogaron haber ganado la Guerra Civil (aunque ninguno de los que retrata combatieron).
El libro es estretenido y te engancha a fin de conocer en qué termina todo. Pero no es un libro tramposo. Vamos siguiendo la investigación y vamos viendo a donde nos quiere llevar a la vez que el investigador. Los giros finales se antojan creíbles y en sintonía con lo que te esperas en base a lo que estás leyendo.
Si además conoces Galicia te atrae porque te imaginas las carreteras y los valles que describe.
En definitiva, una entretenida novela de verano.

sábado, 7 de julio de 2018

Libros del verano 2018. Segunda parte

John Le Carré "El legado de los espías"
Empecemos diciendo que me ha gustado. Es un libro con un regusto sentimental a tiempos pasados. Los recuerdos de un espía analizados por una comisión de investigación. Me parece una metáfora de la vida de cualquiera en la que el análisis de los hechos que te sucedieron hace muchos años a la luz de hoy día te parecen increíbles.
Estamos ante un libro breve, pero intenso. Además el final es definitorio de la importancia que tiene lo que nos parece trascendental en la vida: ninguna. El tiempo todo lo cura y todo lo relativiza

viernes, 6 de julio de 2018

Libros del verano 2018. Primera parte

Luis Zueco: "El monasterio".
No había leído nada de este escritor hasta el día que vi anunciado este libro. Me llamó la atención porque está ambientado en el monasterio de Veruela y decidí leerlo.
El libro es muy similar a "el nombre de la rosa". Se basa en un asesinato que debe resolver alguien de fuera recién llegado al monasterio. La intriga te lleva por el problema con el secretismo de los monjes. Al final la resolución destapa un montón de "pecados" de todos los monjes de la congregación. Por esto no es muy original, ni siquiera un buen libro.
Para mí se deja leer porque conozco el monasterio y la zona y me atrae el ambiente. El leer cómo se forma una ciudad alrededor debido a todos los nuevos oficios que surgen como consecuencia del crecimiento del monasterio es muy atrayente.
En definitiva, una novela que se puede dejar pasar salvo que te atraiga por otros matices, como me pasa a mí.

martes, 5 de junio de 2018

Vacaciones del verano 2017. Décimo novena parte

Un día curioso. Al levantarnos hay bruma. Es tan cerrada que no se levanta en toda la mañana. Sin embargo, nos vamos a la playa y allí se está bien, incluso es el día que más quema el sol. Nos llegamos a bañar hasta tres veces porque el agua está muy caliente. A media mañana me voy otra vez al chiringuito a tomar un café. La sensación de vacaciones allí sentado viendo el mar y escuchando chill-out es total.
Después nos vamos a la piscina hasta las tres.
Comemos y la siesta. Cerramos la temporada de piscina estando allí hasta el cierre. La verdad es que, aunque la playa sea peor que otras en las que hemos estado otros años, lo que es la urbanización, es la mejor.
Después de la ducha y la cena de Aitana nos vamos de nuevo a Salobreña a la freiduría, espléndida de nuevo, para cerrar las vacaciones con un helado y otro hinchable con tobogán. No podemos resistirnos a la insistencia de la niña y terminamos comprando chuches.
Al final, para la cama satisfechos, que mañana es día de vuelta.

domingo, 3 de junio de 2018

Vacaciones del verano 2017. Décimo octava parte

Día de vuelta. Nos levantamos a las 6 y hacemos las maletas. Entre esto, desayunar y meterlo todo en el coche salimos a las 8:45.
Dos horas y llegamos a Guarromán. Me ha hecho ilusión parar pensando la de veces que se pararon aquí los padres a comprar aceite. Cualquier parada te consume un montón de tiempo, así que entre unas cosas y otras gastamos una hora más en llegar al "Pepe de España" donde nos echamos otra media hora. Es curioso cómo el defender un modelo de España se termina convirtiendo en cutre de lo exagerado que es todo. En cualquier caso nos tomamos un café que nos sorprende porque no nos clavan.
.
Desde aquí ya tres horas sin parar hasta Medina del Campo donde subimos al Castillo para comer en la explanada lo que llevábamos. La verdad es que en tres horas nos hacemos 360 km, lo que no está nada mal sabiendo que nos paramos a recargar gasolina.

Una hora más tarde nos ponemos en camino abandonando la autopista para ir hasta Medina de Rioseco. A las cinco y diez nos paramos a comprar Chuches ya en una zona conocida y seguimos camino para llegar a Canalejas a las 6.

En total 9 horas y media de viaje, aunque con casi tres de paradas, por lo que nos hemos cruzado España en 7 horas.

jueves, 31 de mayo de 2018

Vacaciones del verano 2017. Décimo séptima parte

Día espléndido para la playa. A las 10:30h ya estamos jugando en la arena. Cuando nos bañamos vemos peces de todos los tipos. Una gozada.
Había una visita a primera hora que se ha ido quitando a lo largo de la mañana. A mediodía me voy al chiringuito a tomar un café y luego la que lo hace es Tere. Es muy agradable sentarse mirando al mar, con música chill-out y viendo el paisaje.
Llama Elena para pedir ayuda con un problema con la tarjeta de la Seguridad Social.
Después nos vamos a la piscina mientras Tere se va al super del barrio a comprar comida.
Aunque parezca increíble, hoy dormimos siesta y nos vamos a la piscina. Está tan cansada que a las 8 ya quiere subir.
Después de cenar Aitana nos vamos a Salobreña y volvemos a cenar en la freiduría fantásticamente bien: toditos y mezcla de pescaditos.
Terminamos el día comiéndonos un heladito y en el hinchable.
Al salir nos damos cuenta que hay una humedad tremenda, muy superior a la de Motril, por el rocío en las ventanillas del coche.

martes, 29 de mayo de 2018

Vacaciones del verano 2016. Décimo sexta parte

Otro día espléndido. Aitana empieza a estar muy cansada y se levanta tarde. Hace tanto calor que el día se nubla un rato a las 10, pero a las 11:30 nos vamos a la playa con un sol maravilloso.
Ahora sí que la playa está bien y nos bañamos, jugamos con las palas y vemos peces. Después nos vamos a la piscina.
A la tarde volvemos a ir a la piscina y luego nos duchamos mientras cena Aitana.
Nos vamos al rastro nocturno por la playa. La verdad es que es muy grande y tiene de todo. Compramos unos escarpines y una sandalias, además de una silla de playa para la niña y fruta.
Se hace tarde, por lo que volvemos a casa sin hinchables. Por el camino nos llama Zulema y nos comenta que al final se van a Irlanda.

martes, 22 de mayo de 2018

Vacaciones del verano 2017. Decimoquinta parte

Mañana de playa. Está expléndida. Ha mejorado el clima y el agua está en calma como una balsa de aceite. Aprovechamos y estamos muchísimo rato. Después, piscina hasta que cierran para comer.
Por la tarde vamos sólo a la piscina y después nos duchamos mientras cena Aitana.
Decidimos irnos a Sariñena a cenar. Hay más ambiente que en Motril, pero sin agobios. No hay un ruido excesivo en la calle y sí que hay los suficientes bares para disfrutar.
Cenamos en una freiduría que ve Tere por internet. Muy bien.
Después damos un paseo por el paseo marítimo y Aitana se monta en el único hinchable que hay (por cierto, mucho más barato que los de Motril).
Con todo hecho, cena y juego de Aitana volvemos a casa satisfechos. La playa de Sariñena es muy agradable.

martes, 15 de mayo de 2018

Vacaciones del verano 2017. Decimocuarta parte

Hoy ha mejorado el clima por lo que volvemos a nuestra zona de playa. Con la mejoría comprobamos que en el agua las piedras son pequeñitas y redondeadas, por lo que nos podemos bañar sin problemas. Aitana y yo nos ponemos a buscar peces con las gafas y lo pasamos fenomenal.
A media mañana me voy a la terraza del chiringuito y me tomo un café con vistas a la playa en plan relajado, ¡Fenomenal!
Después nos vamos con tía Rosa a la piscina.
Una pena, comemos pronto y nos vamos a Málaga a dejarles en el avión. Después entramos en Málaga a repostar, pero hace mucho calor y no nos detenemos a ver la ciudad. Seguimos hasta Salobreña a comprarnos helados.
De vuelta en casa nos vamos a la piscina y a los hinchables tras la cena. Al final la niña no podía más y tuvo que bajarse del de saltar totalmente agotada.

jueves, 10 de mayo de 2018

Vacaciones del verano 2017. Décimotercera parte

Mañana de playa, nos vamos de nuevo a la zona de los caballitos en coche. Hay un mercadillo y Tere compra unos pimientos baratísimos. Viene Rosa con nosotros y después nos vamos a la piscina.
Tarde de piscina y luego a misa. Allí nos despedimos de la niña que juega con Aitana porque se van mañana. Después nos vamos a cenar y salimos a comer un helado de despedida porque mañana se van los tíos. ¡Qué pena que todo se acabe tan pronto!

martes, 17 de abril de 2018

Vacaciones del verano 2017. Duodécima parte

Amanece soleado, parece que será un día espectacular. Nos vamos a la playa y luego a la piscina.
Por la tarde sólo nos vos a la piscina y al anochecer nos vamos a Almuñécar. Primera odisea: ¡aparcar! Recorremos el paseo varias veces antes de encontrar un sitio lejísimos, pero que nos permite recorrer la calle donde vemos los restos de un pueblo fenicio que quedan por la zona. En ese mismo parque hay un escenario en el que hay actuaciones a diario. Hoy toca flamenco.
Seguimos andando y nos encontramos un palacio donde se recita poesía.
El paseo marítimo tiene bastante ambiente, bares, mercadillo, etc.
Cenamos en una freiduría que está hasta la bandera, por lo que terminamos llevándonos la comida en cucuruchos a la playa. Para completar la cena nos comemos unos goofress y un helado con nata.
Al final volvemos a casa. Me paro en una farmacia y compro un líquido para las heridas de los talones.

miércoles, 21 de marzo de 2018

Vacaciones del verano 2017. Undécima parte

Al volver del cabo de Gata de nuevo vemos elar de plástico de la zona de El Ejido que se prolonga prácticamente hasta Motril. Hacemos todo el recorrido de vuelta escuchando a Jarre que suena muy apropiado para el paisaje desértico.
En casa bajamos a la piscina y la niña se baña muchísimo rato. Bien.
Después de cenar en la terraza nos vamos a los caballitos. Aitana se monta en el hinchable de la patrulla canina, en los cochecitos y en las colchonetas de saltar. Volvemos andando a casa y a dormir.

martes, 20 de marzo de 2018

Libros de verano 2017. Décimo sexta parte

El último acto de Mari Jungstedt.
Con esta escritora me he ido desilusionado. Sus primeros libros me encantaron. Quizás fuera lo exótico de la isla de Gotland, quizás fuera la brevedad, pero estaban bien.
Después Delos tres primeros libros los siguientes decían y se podįan considerar más de lo mismo. Pero mantenían el tipo.
Llegados a este punto, remarcar que los dos últimos sólo tienen una virtud, ¡Qué son cortos! Y eso dicho por alguien al que le gusta la novela negra y la policiaca, ya indica mucho.
Es una pena, pero ya no merece la pena perder el tiempo leyendo a esta mujer.

Libros de verano 2017. Décimo quinta parte

Yeruldergger, tiempos salvajes.
El primer libro del inspector me gustó. Sin ser una maravilla, lo exótico de la bientación te fascina. Conocer la vida en las estepas mongolas, las peculiaridades de la capital (con yurtas incluidas), la pobreza tras la caída del comunismo y la extraña comida marcan el devenir del libro.
Sin embargo, la estructura no es muy buena. La historia se enrolla en sí misma sin demasiado sentido. Se utiliza el recurso de las tradiciones y los chamanes, monjes, etc para hacernos tragar con ruedas de molino en algunos giros insostenibles del argumento.
Por lo tanto, no es un gran libro. Aunque se deja leer.

Libros de verano 2017. Décimo cuarta parte

En caída libre, saga Miles Vorkosigan 01, de Lois McMaster Bujold.
Un libro de ciencia ficción bastante antiguo. Sin embargo toca un tema de actualidad, los clones y la manipulación genética. La premisa es la vida en una estación espacial inmensa que sirve de puerto de embarque de naves espaciales para el transporte de un raro mineral que se extrae del planeta cercano. Para mejorar la producción la compañía ha manipulado géneticamente a las personas para que tengan dos brazos más en lugar de las piernas, aprovechando que no hay gravedad.
Transcurrido un tiempo el mineral deja de ser necesario y deciden destruir la estación y los seres allí creados. A partir de aquí, hay personas que se niegan a la matanza y que luchan por los seres más desfavorecidos.
En definitiva, una novela sobre el bien y el mal.
¡Entretenida!

Libros de verano 2017. Décimo tercera parte

Yeruldergger, muertos en la estepa de Ian Manook.
Este segundo libro sólo mantiene la curiosidad de estar ambientado en Mongolia. Por lo demás la historia es normal. No nos sorprende y por lo tanto no estamos ante una buena novela policiaca.
La historia es enrevesada a más no poder, pero sin ser especialmente atractiva.
Una desilusión

Libros de verano 2017. Duodécima parte

Marte azul de Kim Stanley Robins.
La primera novela de la saga "Marte rojo" estaba bien. Está ya es peor. Pero no por que sea peor novela, es porque es más de lo mismo.
La acción se sitúa inmediatamente después de la anterior. Vemos las consecuencias de la rebelión con la que termina la primera parte. Después ocurren una serie de hechos que rellenan más y más páginas sin llevar a ningún sitio. Parece que lo único que pretenden es alargar la novela para detallarnos las vidas de los protagonistas. Sin embargo, no se profundiza excesivamente en sus personajes, por lo que no aporta nada nuevo.
Finalmente, la novela termina de nuevo con una rebelión, por lo que se anuncia una tercera parte igual a las dos primeras.
Una decepción.

Libros de verano 2017. Undécima parte

La playa de los ahogados de Domingo Villar.
Segunda novela en las rías bajas. Me encanta. La trama te engancha desde el principio y está muy trabajada, se nota que conoce la zona y aprovecha las posibilidades del paisaje para desarrollar su historia.
La pareja de detectives continúa con la adaptación entre ellos y va avanzando en su trato.
En definitiva, una novela negra entretenida

Libros de verano 2017. Décima parte

Corazones de piedra de Simón Scarrow.
Novela sobre la II Guerra Mundial. Soldados y más soldados.
No me convenció mucho.

Libros de verano 2017. Novena parte

Los hijos de Adán de Eva García Saenz.
Curioso libro. La premisa inicial es que hay una familia que no envejece y lleva viviendo desde la época de los primeros hombres. Lógicamente, son muy ricos y viven muy bien.
El argumento ya es otra cosa, porque al final trata de las relaciones familiares complejas en una relación de miles de años, por lo que están viciadas de antemano. ¡No hay mucho más!.
Un pena, porque los libros de Vitoria son bastante buenos.

Libros del verano 2017. Octava parte

Ojos de agua de Domingo Villar.
Los libros de este autor gallego me fascinan. No es que sean extraordinarios, pero hablan de escenarios de las rías bajas que conocí de niño con los padres y los de Ponferrada. Sólo por eso, ya merecen un recuerdo y se ganan un sitio en mi corazón.
La novela en sí es original. Intenta describir una investigación policiaca con una pareja de policías muy diferentes. En esto no es muy original, la historia nos revela multitud de parejas de policías diferentes condenados a entenderse. Pero la trama está bastante bien realizada y el desenlace, aunque sorprende, no es fruto de un giro inesperado.
Bien.

Libros del verano 2017. Séptima parte

Los ritos del agua de Eva García Saenz.
Está muy bien. Los libros de esta mujer, sin ser obras maestras, son muy entretenidos.
De nuevo se basa en crímenes rituales siguiendo patrones de hechos tradicionales vascos. Esto convierte la historia en algo original que la diferencia de otras y que la hace reconocible. El inspector de policía se encuentra en una situación personal muy complicada (consecuencia de lo ocurrido en la primera novela), que agrava con su cabezonería ya habitual. Se siguen utilizando, como elemento de tensión, las implicaciones directas del asesino con miembros del equipo o familiares del protagonista.
Por lo tanto, lo que debe intentar evitar en sucesivas novelas, para evitar que sean repetitivas, es seguir implicando sentimentalmente al protagonista. Las historias pueden seguir siendo policiacas, pero sería idóneo que buscará que fueran más profesionales.

Libros del verano 2017. Sexta parte

Hyperion de Dan Simmons.
Otro libro de ciencia ficción. Lectura agradable para el verano.
Estamos ante una situación en la que el ser humano a poblado multitud de mundos por toda la galaxia. En un período de crisis seis personas se dirigen a un santuario que recorre el tiempo a la inversa donde esperan obtener respuestas a la crisis que se desencadena. Cada uno de ellos tiene una historia que le relaciona con ese planeta y es por la que se ofrecen voluntarios para la aventura. El libro avanza al compás de esas seis historias, pero una vez que acaban ya no sabe seguir y se queda en punto muerto, claramente en previsión de una segunda parte.
Bien, pero le falta mucho para atraparte como una obra maestra.

Libros del verano 2017. Quinta parte

Marte Rojo de Kim Stanley Robins.
Un libro curioso. Trata de la llegada a Marte para establecer una civilización. Con una apariencia científica arrolladora nos describe cómo se establecen los mecanismos tecnológicos para el desarrollo de las primeras ciudades.
El problema del libro es que, pese al aparente rigor científico, da una apariencia de patraña de cuidado. ¡No puede ser tan fácil establecerse en un planeta helado y sin atmósfera!.
Lo que si consigue es entretener y abrir la curiosidad por ver cómo termina todo.
También intenta ser una metáfora de los problemas del ser humano para vivir en sociedad. En la nueva civilización se repiten los errores de la Tierra agravados por la influencia de ésta en el planeta.
Está bien pero se hace pesado por el exceso de explicaciones científicas que un seguidor del género no necesita que sean tan exhaustivas.

Vacaciones del verano 2017. Undécima parte

Otro día más amanece nublado y decidimos ir a Nerja. Entre la cola y la clavada del precio decidimos no entrar a la cueva. Nos vamos al pueblo y vemos el barco de "chanquete". Nos encontramos con que se ha convertido en una ciudad y las playas son pequeñas y malas. El barco es tal cual esperábamos pero la colina se ha rodeado de casas. Después de cantar y hacer el tonto un rato, nos vamos.
Otro pueblo blanco más: Frisiole, donde Aitana se pasa una hora en los columpios.
Ya de vuelta Maritere y Rosamari compran lo necesario para comer hamburguesas en casa.
Ya de tarde Rosamari y Aitana se dedican a pintar y después a bañarse en la piscina.
Una tarde maravillosa desemboca en una paseo nocturno por la playa y terminar cenando pescado en el García. Por desgracia, a la vuelta habían cerrado los caballitos y Aitana se desilusiona.
Una última sorpresa, la mansión que está pegada a a la playa, perteneció a Balduino de Bélgica.

miércoles, 14 de marzo de 2018

Vacaciones del verano 2017. Décima parte

Un día con muchas nubes. Incluso se nubla a ratos. Buen día para ir a Granada
Al llegar por la mañana nos vamos a los Jerónimos y a San Juan de Dios. San Juan es una iglesia de un barroco recargadísimo y muchísimos espejos. Como favor especial nos dejan subir detrás del altar. Los Jerónimos son recargados, pero más normalizado.
Después de comer en un restaurante de toda la vida que nos recomienda el vigilante del monasterio (estaba toda la tercera edad de Granada comiendo allí), nos vamos a la catedral (bastante sencilla, no merece mucho la pena) y a las tumbas de los Reyes Católicos en un edificio contiguo (con entrada aparte).
De nuevo en el coche nos vamos a la Alhambra pasando por el mercado árabe del Albaicín.
Empezamos la visita por el Generalife: jardines espectaculares y patios preciosos por el agua y las vistas desde lo alto.
Continuamos atravesando toda la ciudad hasta los palacios nazaríes. Cumplen con creces cualquier expectativa que se pudiera tener. Son maravillosos. No por haberlos visto tantas veces en fotos y el reportajes en televisión impresionan menos. Una maravilla. Me he acordado muchas veces de mamá y de la pasión con la que me habló de ellos tantas veces.
Ya de vuelta nos metemos por las Alpujarras hasta Lajarón. Curioso pueblo, entre la fábrica de agua, las fuentes termales y los ancianos del Inserso parece una ciudad de ambiente. Es lamentable ver a todos los ancianos sentados en sillas delante de sus hoteles esperando, ...
Sin embargo el premio está en las vistas de la ladera de la montaña, espectacular.

Vacaciones del verano 2017. Novena parte

La mañana empezó agitada. Las quemaduras de los dedos de Aitana nos obligan a Tere y a mí a ir a la farmacia a comprar Betadine. Después de volvernos vamos a la playa y Tere se va a dar un paseo, mientras la niña y yo jugamos a las palas. Después nos bañamos un rato, aunque no mucho porque las olas y las piedras nos molestan.
Cuando vuelve Tere se baña con la niña y se cae con una ola raspádose una pierna y el muslo.
Volvemos a la piscina y nos bañamos un rato con Rosamari.
Al mediodía comemos en la marisquería paella de marisco y terminamos con un helado en la heladería de la esquina.
Después de la siesta y los deberes de Aitana nos vamos a la piscina todos juntos. Una tarde perfecta antes de irnos de noche a Salobreña.
Pero eso es otra historia

sábado, 10 de marzo de 2018

Vacaciones de verano 2017. Octava parte

La carretera que va de Marbella a Ronda es la más cómoda de las que llegan a ésta última. Es la mejor carretera, atraviesa la sierra por un paso con menos cuestas y el paisaje es menos agreste. Los bosque cubren las laderas de la montaña, pero ahora sí hay hierba y tierra en el suelo, no es todo roca.
Marbella desilusiona. Una vez que pasas las urbanizaciones de lujo en las laderas de las montañas, el pueblo es vulgar y anodino.
Cogemos la carretera de la costa y atravesamos Fuengirola, Benalmádena y Málaga. Torres, torres y más torres. Turismo a lápiz más alta escala, ¡De especulación!.
El día ha sido largo, pero al llegar a casa no se acaba. Aitana se quema con la bombilla quitamiedos y Alfonso y yo nos vamos a la farmacia a comprar silvederma. Está en lo más alto de Conil y tenemos que atravesar barrios y más barrios de lo más típico de aquí. ¡Curioso!

viernes, 9 de marzo de 2018

Vacaciones de verano 2017. Séptima parte

Gran día. Nos levantamos y nos vamos a Málaga a buscar a Rosa María y Alfonso. El aeropuerto es grande y està muy mal señalizado. Nos tomamos un café juntos y nos vamos hacia Alhaurín. Como las chicas no quieren, no vemos la carcel. Así que cogemos la carretera de Coín, donde Rosa María y Tere van al banco y la farmacia. Es curioso pero desde este pueblo de la sierra Tere llamar a una amiga de Bakio que nació aquí.
La carretera que cruza la sierra es mala, pero cruzamos unos bosques de árboles que parecen crecer en la roca, de tan pelado que es el paisaje.
Después de muchas curvas llegamos a Ronda y paseamos por la calle principal hasta la plaza del ayuntamiento donde comemos  un plato del día muy rico.
Tarde, y tarde de toros. Al menos de plaza. Vemos la plaza y nos paseamos por el jardín que da al valle con el nombre de Hemingway. Después, el fastuoso puente sobre el tajo. Volvemos a la calle principal y helado. La sorpresa es ver aparecer a Alfonso con una gorra de legionario.
La vuelta, para otro día

viernes, 23 de febrero de 2018

El final de la esperanza. Epílogo

La guerra ha terminado hace un mes y no tenemos noticias. Las niñas preguntan por su padre y no sé ya que decirles.
Nadie sabe nada, nadie nos dice nada. Pero me niego a pensar lo peor. Hoy ha llegado una carta que escribió la noche del armisticio. Transmite desesperación e incertidumbre en el futuro. Sin embargo esa misma noche se firmó la paz. Ya no le pudo pasar nada.
¿Por qué no nos dicen dónde está su regimiento y cuándo volverán a casa?
¿Por qué no vuelve?

jueves, 22 de febrero de 2018

El final de esperanza. Tercera parte

Hemos empezado el día con unas órdenes insensatas. El plan es atacar sin dar la alarma y sin fuego previo de artillería. Intentar sorprender al enemigo. A estas alturas sorpredernos unos a otros es imposible, pero, órdenes son órdenes.
He mandado a mis hombres a una carnicería sin sentido, a una muerte segura. Unos instantes después ha llegado un mensajero con el acuerdo de paz firmado hace 5 horas. Me he vuelto loco y he tocado la sirena como si quisiera aplastar el botón. No ha servido de nada y cuando me he apoyado en el parapeto no quedaba nadie. Todos han caido.
¿Qué he  hecho?
¿Qué me han pedido hacer?
¿ A quién se le ocurrió firmar la paz y no comunicarlo hasta 5 horas después?.
¿Qué más da si hemos ganado o hemos perdido si desprecian de esta manera nuestras vidas?
¿Para qué han muerto mis hombres? ¿Alguien responderá por esto?

miércoles, 21 de febrero de 2018

El final de la esperanza. Segunda parte

Esta mañana han circulado rumores de una tregua por las trincheras. Creo que el hambre nos está jugando malas pasadas.
Suena la sirena mientras sigo disparando la metralleta. Este último ataque ha sido el más insensato de toda la guerra. No entiendo la razón de esta ferocidad. Menos aún cuando no ha habido artillería de cobertura ni antes ni durante el mismo. Pensarían que tras tantos asaltos fallidos por fin habrían de quebrar nuestras defensas.
Veo como cae el último soldado que quedaba en pie. Quizás a causa de una de las últimas balas que disparé cuando ya sonaba la sirena. Un sargento me agarra por detras y me dice alegremente que la guerra ha terminado. Ayer noche firmaron la paz. Pero nadie nos ha avisado y, parece ser, a ellos tampoco.
¿Qué locura es esta?. La guerra ha acabado y nosotros matamos y ellos mueren en esta mañana gris infame. Hemos matado a cientos de camaradas que ya no eran nuestros enemigos.
¿Podremos perdonarnos esto algún día?
Es duro pensar que tengo que vivir una vida normal después de estos años de trincheras. Sin embargo, vivir con este genocidio de hoy, nos quita la última posibilidad de vivir como personas.
¿Por qué nos han hecho esto?

martes, 20 de febrero de 2018

Vacaciones del verano 2017. Sexta parte

Primer día de playa. Este año la urbanización está tan pegada al mar que podemos ir andando. El día está regular y el agua fría, así que sólo nos bañamos Aitana y yo. Además nos las arreglamos en un trocito de arena entre las piedras para hacer castillos con los cubos. Como todos los años terminamos la mañana en la piscina.
Comemos arroz en casa y después, mié tras friego, Tere y la niña hacen dibujos y letras en el salón.
Volvemos a la playa pero el aire frío hace que esté desapacible, así que volvemos a la piscina.
Pero el día no ha acabado, después de cenar nos vamos al centro del pueblo a los caballitos. Se monta tanto que termina agotada y se duerme en el coche.
La temperatura no acaba de subir, parece una primavera tardía. Algo extraño para el sitio y la época del año en que estamos.