La exhorbitada factura de la electricidad

Llevamos un verano de subidaaa continuas de la electricidad. El Gobierno, siempre dispuesto a auto justificarse, dice que son factores externos, que el gas está caro, que el petróleo está caro, ... ¡Mentiras! ¡Mentiras! y más ¡mentiras! 

Expliquemos un poco esto: lo primero es que el precio de la subasta de la electricidad es por toda ella, independientemente de cómo se produzca (da igual si es por gas, nuclear, solar, eólica o la que ustedes quieran, si es importada o producida aquí). En esa subasta se aplica el precio de la más cara. De esa manera el gas que importamos, que ha subido de precio, es el que marca el valor (aunque sólo representa el 2℅ del total). De esta manera el negocio para las compañías es redondo. El 98℅ lo compran mucho más barato, pero el 100℅ lo venden al precio del más caro. 

Pero nadie se engañe, el Gobierno, éste y los anteriores, es el que ha fijado esta forma de subasta. Y las soluciones que se oyen estos días no pasan ninguna por modificarla. Luego podemos deducir que el Gobierno tiene algún interés en que las compañías ganen mucho. Y, finalmente, vemos que los dos grandes partidos tienen colocados a sus allegados en las mismas compañías, ¡blanco y en botella!