El paisaje precioso, como siempre. Qué recuerdos! Ana llegó tarde por lo que decidimos no hacer la ruta de senderismo de la cascada para no llegar fuera de la hora de comida a Miranda. Una vez allí nos encontramos un mirador nuevo sobre el Duero espectacular.
Comemos muy bien y hacemos algunas compras. También pasamos a ver a la amiga de mamá "Piedade" que nos cuenta alguna cosa más de su vida. Después nos vamos al castillo y la catedral y descubrimos una puerta nueva bajando por una calle que no habíamos cogido nunca.
Camino de Mogadouro a ver una feria templaria. Terminan siendo seis o siete puestos de venta de perrofleutas y dos disfrazados de caballeros. Eso sí, la vista desde el castillo es preciosa.
Vuelta por Bemposta hasta Fermoselle. Un idiota ha arrancado las letras de Franco en la presa, cómo que no hubiese sido en su época cuando se hizo!. Fermoselle es el abandono total. Más de la mitad de las casa están vacías y en venta. No se ven pueblos con tal grado de abandono.
Vuelta a casa por Zamora. El campo está precioso. El agua lo anega todo y se ven los pantanos hasta los topes, lagunas por todas partes y flores por doquier.
Maravilloso.
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