Decidimos irnos a comer a Candelario y de paso visitar el pueblo. Es bonito pero no es Hervás. Además es una pura cuesta.
La tarde empieza con el viaje atravesando la sierra y el maravilloso paisaje al bajar el puerto. Paramos en el área de servicio de la garganta tras Plasencia a tomar café. Después seguimos hasta Badajoz por la carretera nacional. Curiosos paisajes y poco tráfico.
El hotel de Badajoz es muy bonito y nos bañamos en la piscina de agua salada. Bueno Tere y yo porque las niñas se quedan en su habitación. Curioso, el perro no acaba de encontrar la postura en su "cama".
Acabamos el dia cenando en Badajoz. Ante la imposibilidad de aparcar en el centro terminamos en el KFC. Pero antes vemos la Alcazaba y la plaza mayor. Es bonito pero la gente que hay no nos da confianza y nos vamos.
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