Una vida sin dinero diciendo que trabajaba para el servicio secreto. Que se trastoca cuando descubre otras tres mujeres y que había sido expulsado del servicio en 1942. Por lo tanto todas las detenciones, la carcel y la falta de dinero no eran servicios encubiertos, eran mentiras para huir de su situación. Y las desapariciones eran momentos en los que se iba a ver a sus otras familias. Toda su vida era una farsa que destroza a la familia cuando se enteran.
La serie está muy bien, no se hace pesada y mantiene la intriga por descubrir, a la vez que la protagonista, la verdad sobre su marido.
La actuación de Ruth Wilson en el personaje de su abuela es muy buena y absolutamente creíble.
Merece la pena.
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